No es muy frecuente, pero puede pasar que perdamos la llave de coche. La primera opción para solucionar este problema es fácil: coger la llave de repuesto que, casi seguro, tendremos localizada en algún lugar.
Si no la tenemos a mano, tendremos que pedirle ayuda a alguien para que nos la traiga hasta donde estamos. Otra opción en esta circunstancia adversa es contactar con la marca de nuestro coche o con la compañía con quien tengamos contratado el seguro, ya que ambos suelen tener un servicio de recogida de segunda llave -con envío al lugar donde nos encontremos- por un módico precio que pagaremos gustosamente con tal de quitarnos el susto.
La cosa se empieza a complicar cuando no disponemos de esa segunda copia. Un problema, pero con solución. ¿Qué podemos hacer entonces? Lo mejor es contactar con algún taller especializado, como por ejemplo E.Giner, que te sacará del apuro haciendo un duplicado de la llave del coche a través de la cerradura y sin necesidad de romperla. Sacando la cerradura del coche, el profesional sabrá el código de la llave y la centralita de inmovilizador. En E.Giner podemos hacer duplicados de llave de coche aún cuando no tienes ninguna copia.
Otras opciones
Otras posibilidades pasan por volver a llamar tanto al concesionario de la marca del coche como a tu compañía de seguros, aunque estas te van a salir un poco más caras que llamar a los profesionales. La marca del coche te pedirá antes de nada que acredites que el coche en cuestión es tuyo (lo demostrarás con los papeles del vehículo y el Documento Nacional de Identidad). Una vez demostrada la propiedad del vehículo debeos tener a mano el código de la llave que te entregaron cuando te dieron el coche para que la casa pueda hacerte una copia. Si no la tienes, tendrás que pagar más por tu llave.
Finalmente, comentarte que algunos seguros ofrecen coche de sustitución durante el tiempo que tardan en darnos la llave nueva.